Jun 29, 2019 | News
Between 26 and 29 June 2019, in Guatemala City, ICJ and its partner, Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG), with the support of the Asociación Guatemalteca de Jueces por la Integridad (AGJI) and the Bufete de Derechos Humanos (BDH), undertook trainings of more than 12 judges and 20 prosecutors on the international law and standards that apply to the investigation of unlawful death and enforced disappearances.
The workshops were conducted as part of the project under the ICJ’s Global Accountability Initiative entitled, Promoting justice for extrajudicial killings and enforced disappearances in Colombia, Guatemala and Peru, supported by the EU European Instrument for Democracy and Human Rights (EIDHR).
Opening remarks were given by Tomás Pallás Aparisi, Head of Cooperation at the EU Delegation to Guatemala, Delia Dávila, Magistrate from the Supreme Court of Guatemala and Haroldo Vasquez, President of the Asociación Guatemalteca de Jueces por la Integridad AJGI.
Ramón Cadena, Director of the ICJ’s Central America Office, addressed the international law and standards that apply to the investigation and prosecution of unlawful death and enforced disappearances and their relevance to Guatemala. Edgar Pérez, director of Bufete de Derechos Humanos (BDH) discussed the situation of enforced disappearances in Guatemala and the value and applicability of international law and standards. Marco García, a representative of FAFG, outlined the role of forensic science in the investigation of unlawful death and enforced disappearances.
Kingsley Abbott, Senior Legal Adviser & Coordinator of the ICJ’s Global Accountability Initiative, provided an overview of the revised Minnesota Protocol on the Investigation of Potentially Unlawful Death (2016), which formed the core of the materials used at the workshops.
The ICJ took the opportunity of the workshops to visit the office of its partner, the Asociación de Familiares de Detenidos-Desaparecidos de Guatemala (FAMDEGUA) and meet with Justice Delia Marina Davila Salazar of the Supreme Court of Justice of Guatemala.
Contacts:
Kingsley Abbott, Senior Legal Adviser & Coordinator of the ICJ’s Global Accountability Initiative, email: kingsley.abbott(a)icj.org
Carolina Villadiego Burbano, ICJ Legal and Policy Adviser, Latin America, and Regional Coordinator of the Project, email: carolina.villadiego(a)icj.org
Jun 29, 2019 | Artículos, Noticias
Entre el 26 y el 29 de junio de 2019, en la Ciudad de Guatemala, la CIJ, junto con la Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG), y el apoyo de la Asociación Guatemalteca de Jueces por la Integridad (AGJI) y el Bufete de Derechos Humanos (BDH), llevó a cabo actividades de capacitación dirigidas a más de 12 jueces y 20 fiscales, acerca de los estándares internacionales que se aplican en la investigación de las ejecuciones extrajudiciales y las desapariciones forzadas.
Las actividades se llevaron a cabo en el marco del proyecto “Promoviendo justicia para ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas en Colombia, Guatemala y Perú”, bajo la Iniciativa Global de rendición de cuentas de la CIJ, y con el apoyo del Instrumento Europeo para la Democracia y los Derechos Humanos (IEDDH).
Las actividades contaron con la presencia de Tomás Pallás Aparisi, Jefe de Cooperación de la Delegación de la Unión Europea en Guatemala; Delia Dávila, Magistrada de la Corte Suprema de Guatemala; y Haroldo Vásquez, Presidente de la Asociación Guatemalteca de Jueces por la Integridad (AGJI).
En estas actividades, Ramón Cadena, director de la Oficina de Centroamérica de la CIJ, se refirió a la importancia de los estándares internacionales aplicables a la investigación y al enjuiciamiento de las ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas. Además, Edgar Pérez, director del Bufete de Derechos Humanos (BDH), analizó la situación de las desapariciones forzadas en Guatemala y el valor y la aplicabilidad de los estándares internacionales en el país.
Asimismo, Marco García, miembro de la FAFG, describió el papel de la ciencia forense en la investigación de estas graves violaciones a los derechos humanos. Finalmente, Kingsley Abbott, asesor legal senior y coordinador de la Iniciativa Global de Rendición de Cuentas de la CIJ, proporcionó una visión general acerca de los contenidos del “Protocolo de Minnesota sobre la Investigación de Muertes Potencialmente Ilícitas” (versión revisada de 2016).
La CIJ aprovechó la realización de estas actividades de capacitación para visitar a la Asociación de Familiares de Detenidos-Desaparecidos de Guatemala (FAMDEGUA) y reunirse con la jueza Delia Marina Dávila, de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala.
Contactos:
Kingsley Abbott, asesor legal senior y coordinador de la iniciativa global de rendición de cuentas de la CIJ. Correo electrónico: kingsley.abbott(a)icj.org
Carolina Villadiego, Asesora Legal, América Latina, y coordinadora regional del proyecto. Correo Electrónico: carolina.villadiego(a)icj.org
Jun 25, 2019 | News, Publications, Reports
Colombia’s transitional justice tribunal, the Special Jurisdiction for Peace (JEP in its Spanish acronym) has made progress in fighting impunity, but can do more to address the needs and demands of victims of the country’s long civil war, the ICJ said in a report released in Bogota today.
The report Jurisdicción Especial para la Paz: análisis a un año de su entrada en funcionamiento (available only in Spanish) will be presented by a high-level mission composed of the President of the ICJ, Prof Robert Goldman (former President of Inter-American Commission on Human Rights), the Vice President of the ICJ, Carlos Ayala (former President of the Inter-American Commission on Human Rights), and ICJ Commissioner Philippe Texier, former judge of the Court of Cassation of France.
The commissioners will meet with different Colombian authorities including the President of Colombia, Iván Duque Márquez, and the President of the JEP, Patricia Linares Prieto.
They will also meet with victims and other members of civil society.
The JEP is charged with prosecuting and punishing gross violations of human rights and serious violations of international humanitarian law committed during the country’s civil war.
The JEP was established by the Peace Agreement entered into between the Colombian government and the former armed group FARC-EP, on November 24 of 2016.
“The JEP has made progress in guaranteeing victims’ rights and fighting impunity for gross violations of human rights and serious violations of international humanitarian law,” said Prof Robert Goldman, ICJ’s President.
“But the JEP must do more to strengthen the effective participation of victims in its procedures, as well as to guarantee victims’ rights to justice and full reparation in compliance with international standards,” he added.
Accordingly, the report identifies ways by which the JEP can achieve these goals.
The ICJ also expresses concern about security threats faced by human rights defenders and victims and witnesses appearing before the JEP. The ICJ urges the JEP and other Colombian public authorities to adopt effective measures to guarantee their safety.
The ICJ also considers it is necessary to ensure respect for the judicial independence of the JEP against external pressures to ensure the proper performance of its functions.
The report describes the findings of a mission carried out by ICJ Commissioners Carlos Ayala, Wilder Tayler and Philippe Texier in January 2019. The report includes an analysis of the main actions and decisions taken by the JEP as well as relevant decisions of other public authorities. It reflects developments up to June 7, 2019.
Jun 25, 2019 | Comunicados de prensa, Informes, Noticias, Publicaciones
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) es el tribunal de justicia transicional diseñado por el Acuerdo Final de Paz suscrito entre el Gobierno Colombiano y la guerrilla de las FARC-EP, con el fin de investigar y sancionar las graves violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario cometidas en el conflicto colombiano.
En Bogotá, durante la semana del 24 de junio de 2019, será presentado el informe Jurisdicción Especial para la Paz, análisis a un año y medio de su entrada en funcionamiento, por una misión de alto nivel compuesta por el Presidente de la CIJ, Robert Goldman, el Vicepresidente de la CIJ, Carlos Ayala, y el comisionado de la CIJ Philippe Texier, ex juez de la Corte de Casación de Francia.
Para ello, se reunirán con diferentes autoridades colombianas incluidas, el Presidente de Colombia, Iván Duque Márquez y la Presidenta de la JEP, Patricia Linares Prieto. También se reunirán con víctimas y otros miembros de la sociedad civil.
En el informe “la CIJ reconoce los avances realizados por la JEP para garantizar los derechos de las víctimas y combatir la impunidad de las graves violaciones a los derechos humanos y del derecho internacional humanitario”, señala el profesor Robert Goldman, Presidente de la CIJ.
Al mismo tiempo, el profesor Goldman advierte que “la JEP debe avanzar en la adopción de acciones concretas para fortalecer la participación efectiva de las víctimas en sus procedimientos, así como para garantizar su derecho a la justicia y a la reparación integral, conforme a los estándares internacionales”.
Asimismo, la CIJ expresa preocupación por la situación de seguridad que enfrentan las víctimas y los testigos que comparecen ante la JEP. Por ello, exhorta a que la JEP y las demás autoridades competentes para que adopten medidas efectivas que garanticen su seguridad dentro de los trámites de la Jurisdicción.
En esa línea, la CIJ resalta en el documento que, aunque la JEP enfrenta varios desafíos y todavía tiene un largo camino que recorrer, es una institución fundamental para la consolidación de la paz en Colombia. En ese sentido, desde una perspectiva crítica pero propositiva, el informe ofrece insumos para que la JEP fortalezca y desarrolle sus funciones con plena observancia de los estándares internacionales, en particular respecto de los derechos de las víctimas y la sanción efectiva de los responsables.
Por otra parte, en el informe también se concluye que no son necesarias reformas legislativas al marco jurídico de la JEP; sino que solo es necesario que la JEP realice una interpretación de su normativa encaminada a desarrollar, profundizar e implementar, de mejor manera, los derechos de las víctimas, conforme con los estándares internacionales.
Por último, la CIJ también considera esencial que se garantice la independencia judicial de la JEP frente a presiones externas para asegurar el correcto ejercicio de sus funciones.
El informe presenta los hallazgos encontrados por una misión de la CIJ integrada por los comisionados Carlos Ayala, Wilder Tayler y Philippe Texier, la cual se realizó en enero de 2019. Estos hallazgos fueron ampliados y complementados con un análisis de las principales actuaciones realizadas por la JEP, así como, con un seguimiento a las actuaciones desarrolladas por otras autoridades.
La fecha de corte del informe es el 7 de junio de 2019.
Colombia-Jurisd para la paz-PUBLICATIONS-Reports-Fact-finding mission report-2019-SPA (Informe en PDF)
Jun 3, 2019 | Artículos, Noticias
La CIJ rechaza nuevo acto gubernamental, que atenta en contra de la búsqueda de justicia en casos de graves violaciones a los derechos humanos cometidas durante el conflicto armado interno.
En esta ocasión, se trata de afectar el Archivo Histórico de la Policía Nacional (AHPN), que desde el año 2005 se encarga del resguardo, conservación y custodia de los archivos de la extinta Policía Nacional, que fuera una de las instituciones nacionales causantes de graves violaciones a los derechos humanos, durante el conflicto armado interno.
Después de más de una década de contar con el apoyo de la Comunidad Internacional, este archivo se considera una fuente importantísima para conocer la verdad de lo sucedido durante el conflicto armado interno y para lograr aclarar investigaciones y entablar acciones de persecución penal por parte del Ministerio Público y para lograr que los documentos del AHPN estén protegidos; para ello, el Ministerio de Gobernación, firmó con el Ministerio de Cultura de Deportes, el convenio interinstitucional 24-2009, con validez hasta el 30 de junio de 2019.
Sin embargo, el Ministro de Gobernación expresó recientemente, que no renovará el convenio interinstitucional 24-2009, en el cual acordaron conjuntamente con el Ministerio de Cultura de Deportes, la permanencia de los documentos del AHPN en el edificio en el que fueron encontrados, propiedad del MINGOB, por el plazo de 10 años, plazo que vence el 30 de junio de 2019; de esta forma, podría afectar no solo el acceso a la información contenida en el AHPN, argumentando que dicho archivo, contiene información de seguridad nacional, sino que también el resguardo y utilización como prueba importante, de dichos documentos en los juicios respectivos.
Nuevamente, esta posición del Ministro de Gobernación se puede considerar un “fraude de ley”, ya que el acto de no renovar el convenio interinstitucional 24-2009 persigue como resultado un acto prohibido por el ordenamiento jurídico nacional e internacional, como lo es debilitar la lucha contra la impunidad.
La CIJ lamenta que esta nueva posición del Ministro de Gobernación, se una a la de no renovar el mandato de la Comisión Internacional contra la Impunidad (CICIG) y al debilitamiento de la actual Policía Nacional Civil y a la llamada implementación de una “agenda regresiva”, que ha venido impulsando el Congreso de la República.
Ramón Cadena, Director de la CIJ para Centroamérica expresó: “Las decisiones del Ministro de Gobernación en torno al AHPN puede llegar a representar un grave retroceso y denegación de justicia a las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos, cometidas durante el conflicto armado interno.
De llegar a implementarse pueden considerarse como un incumplimiento de las obligaciones del Estado de Guatemala en materia de verdad, justicia y medidas de no repetición.”
Cabe recordar que los estándares internacionales resaltan la necesidad de preservar los archivos que contengan información sobre las graves violaciones a los derechos humanos, así como la obligación de poner a disposición del público, dicho archivos.
Así, el Conjunto de Principios actualizado para la protección y la promoción de los derechos humanos mediante la lucha contra la impunidad, establece en su principio 14 que “El derecho a saber implica la necesidad de preservar los archivos.
Se deberán adoptar medidas técnicas y sanciones penales para impedir la sustracción, la destrucción, la disimulación y la falsificación de los archivos, entre otras cosas, con el fin de que queden impunes los autores de violaciones de derechos humanos y/o del derecho humanitario”.